Nuestra misión
Difundir Okinawa Isshin Ryu Karate Kobudo Asociación a través de una formación integral a niños, adolescentes y adultos, respetando su individualidad, guiándolos en la adquisición de valores, para así fortalecer su personalidad y enfrentar de una manera más óptima las necesidades actuales. Las herramientas que entrega el Dojo Isshin Akira benefician significativamente a mejorar la calidad de vida en los aspectos emocional, mental, físico y deportivo. Pretendiendo dar a los alumnos una experiencia única en la práctica Física para conservar el cuerpo, en la búsqueda del ser interior y la práctica de las buenas conductas.
De la misma manera, el Dojo Isshin Akira está pensado para ser un lugar donde podamos crecer y formarnos, además de desarrollar herramientas que fortalezcan el cuerpo, la mente y el espíritu, a través del entrenamiento, camaradería y experiencias de todos los integrantes, fomentando el ámbito social y valórico, como lo caracteriza la familia Isshin Ryu.
Nuestra visión
Ser un Dojo donde se fomente la creatividad, proactividad, innovación y confianza. Comprometido a que cada integrante pueda formarse y desarrollarse en lo personal, social y espiritual. Logrando a través de lo formativo niveles significativos en Karate, que cada persona disfrute lo que hace, mejorando su calidad de vida.
Además, ser reconocido como una entidad formativa y deportiva por la familia y sociedad, entregando a la comunidad la posibilidad de acceder a nuestras actividades y programas, generando una transformación cultural y valórica como modelo de responsabilidad social.
El Dojo Isshin Akira inicia su formación el día 22 de octubre de año 2003 y finalmente se inscribe el día 6 de Noviembre del mismo año en Chile Deportes. Bajo la ley N° 19712 “Ley del Deporte” con el registro N° 900399-1.
Desde entonces el Dojo Isshin Akira ha entregado a sus alumnos, de diversas edades (niños, adolescentes y adultos) herramientas esenciales, no solo en el ámbito del arte marcial, sino más bien en lo cotidiano formando personas integras, perseverantes y con una amplia gama de valores, lo que impacta en el desarrollo integral del practicante del Dojo Isshin Akira, beneficiando significativamente su calidad de vida. Pretendiendo dar a los alumnos una experiencia única en la práctica física para conservar el cuerpo, en la búsqueda del ser interior y la práctica de la buena conducta. Aquella persona que ingrese a nuestro Dojo debe formarse en base a cuatro etapas fundamentales:
1) Etiqueta y buenas costumbres
2) Desarrollo físico
3) Conocimiento y dominio de la técnica
4) Desarrollo mental y espiritual